El confuso episodio que protagonizó la diputada Carolina Píparo y por el que se encuentra detenido su marido, Juan Ignacio Buzali, acusado de doble homicidio en grado de tentativa, tuvo su capitulo «profesional», con la denuncia de los abogados de las víctimas en contra del perito de parte que aportó la defensa para los estudios psicológicos que se le realizaron al acusado.
La realidad es que la psicóloga Liliana Andrea Sedler, no pudo participar de la pericia, por no encontrarse debidamente matriculada en el Colegio de Psicólogos, por lo que no estaba autorizada para ejercer legalmente. “El delito cometido se encuentra tipificado en el Código Penal en el artículo 247 bajo la figura del ejercicio ilegal de la profesión. Al ser un delito de pura actividad y de peligro no se admite tentativa”, explicó Martín de Vargas, abogado de las víctimas.
La denuncia contra Sedler complica la defensa de Buzali, que tras la salida de Fernando Burlando y las contradicciones en las declaraciones de la diputada y su marido, ahora suma un nuevo escándalo, al plantear la actuación de una profesional no matriculada para ejercer como perito de parte.