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A menos de una semana de la media sanción de la Ley de Alquileres en la Provincia de Buenos Aires, continúa el debate; sin embargo los números arrasan: al 100% le cuesta pagar los gastos de ingreso.
El jueves se dio media sanción a la Ley de Alquileres en la Provincia de Buenos Aires; de esta manera la Ley 10.973 sufriría modificaciones drásticas en relación al pago de impuestos, los cargos administrativos de las inmobiliarias y el tiempo de contrato. Lo cierto es que los únicos que no son beneficiarios son los martilleros y los propietarios, que pasarían a alquilar particular por la conveniencia económica, dejando de lado a la inmobiliaria.
El diputado que impulsa la ley es Juan Manuel Cheppi, integrante del bloque Frente Amplio Justicialista y director del Observatorio para el de Desarrollo Local, de Mar del Plata, brindó datos que esclarecen la necesidad de la población para la sanción de la ley. “La provincia dio un paso muy importante en la defensa de los derechos de los inquilinos, que en el sistema que tenemos hoy están desprotegidos”, afirmó.
“Los costos son difíciles de afrontar para la mayoría de los inquilinos: al 42% le cuesta pagar el alquiler les insume entre el 30% y el 50% de su sueldo, hay un 9% que destina entre el 50% y el 70% de su sueldo, y un pequeño porcentaje de casi un 5% que debe destinar a este gasto más del 70% de lo que gana”.
Otro dato que no asombra es que la mitad de los inquilinos alquila a través de una inmobiliaria, “lo que significa que en la situación como está hoy, además de afrontar el costo del alquiler, deben afrontar los gastos de ingreso a la vivienda que son elevadísimos”.
En este sentido, el diputado agregó que “estamos hablando de los honorarios de los martilleros, y de los gastos administrativos del contrato que hoy corren absolutamente por cuenta del inquilino”. En relación a la importancia de los mismos, los inquilinos comentaron que debieron “hacer un esfuerzo significativo para poder ingresar a la propiedad; solo un 1% dijo lo contrario”.
“Lo más significativo es que esos servicios que está pagando el inquilino para acceder al alquiler, con costos muchas veces elevados y hasta abusivos, ni siquiera son en beneficio propio, sino en beneficio de los propietarios. Si el martillero trabaja para el propietario, ¿por qué el inquilino debe hacerse cargo de los gastos?”.
Por último, el diputado manifestó que “es importante señalar que el problema de fondo con el que estamos tratando acá es la falta de oportunidades para el acceso a la vivienda propia, pero en un contexto nacional de tantas dificultades económicas, en el que la garantía de ese derecho parece cada vez más lejana, debemos atender la situación más inmediata que son los obstáculos y los abusos que sufren quienes quieren, deben o se ven obligados a alquilar”.
