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En todo en el mundo, y en medio de la pandemia, se conmemora la Semana del Parto Respetado. Tanto desde el ministerio de Salud como el Colegio de Obstétricas aclararon la norma que garantiza dicho derecho.
Desde el 2004, en la Argentina rige la Ley de Parto Humanizado, con una atención centrada en los derechos de la embarazada y del recién nacido. Por lo que esta tercera semana de mayo se conmemora la Semana Mundial del Parto Respetado.
En el contexto de pandemia, que atraviesa el mundo, el parto respetado “sigue siendo un derecho con algunas adecuaciones”, afirmó la coordinadora del área de Obstetricia y Ginecología de la Dirección de Salud Perinatal y Niñez del Ministerio de Salud de la Nación, María Julia Cuetos.
Cuetos agregó que, producto de esta situación, “al llegar a un establecimiento sanitario tanto la persona gestante como el acompañante pasarán por un triage en donde les tomarán la temperatura, les van a hacer algunas preguntas para saber si pueden ser casos sospechosos de Covid-19, y a partir de ahí derivarlos al sector correspondiente”.
En este sentido mencionó que “el acompañante no debe ser mayor de 60 años, ni ser un niño, ni tener alguna enfermedad preexistente. Estará registrado como acompañante para poder permanecer siempre con la persona gestante y podrá estar con ella en el momento del nacimiento”.
Por su parte, desde el Colegio de Obstétricas de la provincia de Buenos Aires recordaron los derechos que garantiza la Ley nacional 25.929 de Parto Humanizado que es de aplicación obligatoria en todo el sistema de salud argentino.
- El respeto de los tiempos de parto y a la intimidad
- Que no se discrimine a la mujer en el momento de parir
- Poder elegir quien acompañe los momentos de trabajo de parto,parto y posparto
- La posibilidad de tener al bebé en la misma habitación, durante el tiempo de internación, a menos que requiera cuidados especiales
- Que la mujer y su familia reciban información concisa, en un lenguaje claro, para comprender en todo momento lo que sucede, así como los beneficios de amamantar, el estado de salud del recién nacido e incluso los efectos nocivos del uso de tabaco, alcohol y drogas.
Desde la entidad bonaerense aclararon que, en este momento particular, atravesado por la pandemia por COVID-19, “es importante que en todos los establecimientos, públicos o privados, se respeten las normas de bioseguridad para salvaguardar a la mujer, su bebé y el equipo de salud que los asista, en pos de lograr una atención de calidad”.
Asimismo afirmaron que “ahora, es cuando las Licenciadas en Obstetricia debemos actuar con mayor ímpetu, acompañando a las mujeres y sus familias en todo momento transmitiéndoles calma y confianza”.
