En el marco del día internacional para la prevención del abuso sexual infantil contra los niños, desde la red de psicólogos feministas buscan eliminar estas prácticas desde una mirada integral.
Desde el año 2000, cada 19 de noviembre se conmemora el Día Mundial para la Prevención del Abuso contra los niños y niñas para poner en evidencia la magnitud de este problema y exigir al Estado las políticas necesarias para afrontarlo, porque es un flagelo que afecta a miles de niños y niñas.
Ante esto, la Red de Psicólogues Feministas buscó “reflexionar “y seguir proponiendo nuevas formas de modificar una práctica tan naturalizada y culturalmente avalada por instituciones de poder.
El abuso sexual es un tipo de maltrato hacia la infancia (existen otros tantos: físico, de abandono o negligencia adulta, explotación laboral, discriminación, por nombrar solo algunos). El abuso sexual infantil se corresponde con aquellas conductas que involucran al niño en cualquier tipo de actividad sexual para las cuales no está en condiciones psicológicas ni de maduración para prestar su aprobación y consentimiento, las cuales no comprende ni mucho menos desea.
De esta forma, el abuso Sexual Infantil es transversal y universal: “no ocurre únicamente en nuestro país ni solamente en una institución o situación específica. No podemos pensarlo aisladamente aunque sí trabajar sobre los efectos de aquello en la subjetividad de quienes nos consultan”. Es por ello que es de gravedad, “las consecuencias de los abusos durante la infancia tienen consecuencias durante y posteriormente”.
Cabe destacar que Según estimaciones de la Organización Mundial de la Salud, 1 de cada 5 niñas y 1 de cada 13 niños son abusados sexualmente antes de los 18 años y solo el 10% de los casos son denunciados.
Ante esto, los psicólogos matriculados sostienen que es necesario el acompañamiento de profesionales idóneos a quienes sufrieron abuso. “Conocer y comprender los indicadores de abuso nos permiten poder anticiparnos así como realizar las evaluaciones e intervenciones terapéuticas adecuadas, evitando la revictimización de quien consulta con nosotros”. Desde la Red de Psicólogos Feministas avanzan “hacia la conquista de los derechos que aún no existen y para el cumplimiento de los que en los hechos se ven obstaculizados”.
De esta manera, proponen una mirada integral y feminista para un trabajo con perspectiva de género con poblaciones vulnerables como lo es la infancia y aquellas personas que sufren o sufrieron abuso sexual.
Por su parte, un recorte estadístico del Programa “Las Víctimas contra las Violencia” estima que más de la mitad de los abusos sexuales contra niños se produce en sus propias casas y en el 75% de los casos el abusador es algún familiar o persona del entorno cercano y de confianza, según detalla Alejandra Perinetti, Directora Nacional de Aldeas Infantiles SOS Argentina. Esto significa que el lugar que por excelencia debiera ser protector, contendor y de confianza se convierte en un espacio de amenaza, vulneración, humillación y sometimiento para las niños y niños víctimas. Otro dato es que casi el 50% de las víctimas tienen entre 6 y 12 años.